Pocas notas han causado tanto recelo, desde la imposición del fiscal carnal federal y local en Guanajuato y la recién autorizada, la Guardia Nacional. No todo lo que se ordena en la Constitución está exento de trasgresiones, la Guardia Nacional es la versión 2.0 de la fallida Ley de Seguridad Interior aplaudida por los priistas y repudiada por la izquierda, ahora los papeles se han invertido y el actor Diego Luna no sabe qué rol tomar en tremenda novela política.
Para términos prácticos este artículo hablará sobre dos tópicos importantes a la hora de aplaudir la creación de la bondadosa Guardia Nacional, nos enfocaremos en los derechos humanos y las instituciones. Ya que la transformación de cuarta que estamos viviendo, no comprende que hablar de “disciplina militar y derechos humanos” es confundir la gimnasia con la magnesia, simplemente son dos cosas que no se llevan.
AMLO al respecto de que mencionó el proceso para designar al Jefe de la Guardia Nacional será transparente. Nótese que no dice Jefa de la Guardia Nacional, al respecto MacKinnon considera que el reclutamiento exclusivo de varones es profundamente antimasculino, cada hombre reclutado tendría 50% de probabilidades de no serlo si las mujeres debieran también cumplir con un servicio militar. En cuanto a los efectos civiles del servicio militar, cabe señalar que éste entrena a los hombres en el ejercicio de la violencia, tal como lo atestiguan las esposas de los miembros de la policía y del ejército, quienes denuncian que sus maridos han adquirido una capacidad abusiva en razón de sus adiestramientos.
No todo lo que es transparente es entonces moral, honesto o respetuoso de los derechos humanos. En México un gran número que de leyes son letra muerta, especialmente cuando no le conviene ser respetadas por los grupos oligárquicos. El actual gobierno la gran apuesta es la voluntad y la bondad de las personas. Poco a poco, se han construido instituciones que ayudan a supervisar el actuar del gobierno, lamentablemente en este momento son contrapesos que inciden directamente en el acaparamiento del poder del actual líder. Eso y las consultas populares a modo…
En el libro ¿Por qué fracasan los países? Los académicos Daron Acemoglu y James A. Robinson responden esta pregunta bajo el enfoque instucionalista, pero ¿Qué es una institución y por qué son tan importantes?, ¿Qué es más importante la institución o la bondad de los líderes que dirigen esa institución?
Una institución es un grupo de reglas formales (legales, puestas en la ley) e informales (ley no escrita pero que aun así se respeta, como la moralidad, por ejemplo), bajo un mecanismo de instituciones los ciudadanos no solo confiaremos en el líder que ocupe la dirección de las mismas sino además tenemos a certeza que como mecanismo funcionará y que sobrevivirán a través del tiempo. Las instituciones son capaces de regirse por sí mismas como un todo, y cuando son claras sus reglas, responsabilidades y beneficios resultan fáciles de operar y de sobreponer todos los poderes fácticos
En México el 98% de los delitos no son condenados ni tampoco perseguidos, a pesar de tener grandes penas y tener tipificados una gran cantidad de delitos. El gran problema es la estructura de corrupción, impunidad e indiferencia que no son fenómenos explicativos por sí solos.
La Guardia Nacional en papel podría simbolizar una respuesta inmediata para la urgencia de inseguridad que se vive en el país, pero no es el camino, durante más de 12 años la intervención del Ejército y Marina en tareas de seguridad pública, tal como muchos investigadores lo promueven, el ejército atenta a una violación constante de derechos humanos y en un país con tan bajo desempeño legal resulta contraproducente la respuesta si no se fortalece el estado de derecho.
Además hay que agregar que nuevamente se dejan en el olvido las estrategias que buscan alejar a poblaciones vulnerables lejos de las filas de la delincuencia organizada, y se apuesta más por mecanismos reactivos que no solucionan el problema, ni de fondo, ni de raíz, lo que continuará alimentando la cadenita de violencias que no ayuda a construir la paz, ni la seguridad que tanto anhelamos.
Las instituciones no se rigen bajo un término de bondad, sino de aplicar la ley y que los mecanismos funciones de manera que pueda ser condenados los delitos. Existe resultados palpables que las personas cometen delito derivado a la probabilidad baja de ser detenido y condenado por ese delito, es nuestro país esta probabilidad es baja y fomentan los delitos. Y la gran indiferencia de todos los sectores de la población ante la normalizada violencia en la que estamos inmersos.
Isabel Puente* es abogada, Maestra en Derechos Humanos y doctoranda en Sostenibilidad por la Universitat de Valencia, España. Tiene una perrhija llamada Frida y detesta las pasas. mapuenga@alumni.uv.es
Moisés Campos** estudio economía en la UG, se aburre muy fácil y constantemente tiene que hacer nuevas cosas; le interesa el arte, cultura, política e innovación. Actualmente gestiona proyectos creativos. Moycd25@gmail.com