Desintoxicándome por Gabo Díaz

Por si se lo habían preguntado, en efecto, mi palabra favorita del momento es “tóxico” y es que tengo un pedo muy grande con las personas que son así para ellos mismos, es decir, lo que hay en cada uno de nosotros y que no queremos darnos cuenta que existe.

No eres lo que te sucede, eres lo que elijes convertite, así que ahora es tiempo de conocer unos cuantos puntos que nos ayudarán a poder estar bien y tener amor propio, algo que decidí nombrarle desintoxicándome:

-Aprende a querer cada característica que posees haciéndola única.

-Respeta tu cuerpo dándole la aceptación y valor que merece; tú mismo determinas en que medida lo asignas.

-Deja de compararte con tu vecino o hermano, como diría un viejo amigo; para todos sale el sol y brilla dependiendo que tanto abras las ventanas de tu vida.

-Aprende a decir NO, por más difícil que sea debes entender que no puedes ser la chica maravilla ni superman de todo el mundo; cada quien resuelve sus problemas, claro que puedes tenderle la mano a alguien no se la niegues, pero evita inmiscuirte en enredos ajenos.

-Di sí a las cosas que amas, para todo hay tiempo cuando se trata de lo que te quita el aliento, date un rato a solas en un café, en la iglesia o simplemente en tu cuarto escuchando música para relajarte.

-Acepta tus emociones, no las ocultes pues la gente no sabrá nunca que te está dañando si no lo externas jamás.

-Perdona y olvida errores del pasado, el peor juez es tu conciencia y si está tranquila, no hay que preocuparse, al contrario, saber que te ha hecho mejor ser humano adquiriendo experiencia y lecciones.

-Agradece; hazlo para ti en tu mente pues te darás cuenta poco a poco de que lo que reflejas eres y si no estás feliz contigo, no lo serás con otros, por lo tanto, empieza por darte las gracias y cuando estés preparado agradece a todo tu círculo social hazlo frente a frente con cada allegado a ti.

-Permítete hacer lo que te dé la gana, claro sin chingar al otro; todo dentro de las normas civiles (parámetros sociales) para no poner en riesgo tu vida y las de tu entorno.

-Siente orgullo de tus cosas, quién mejor que tú para aplaudir lo que has logrado con esfuerzo, no egolatría sino amor propio; cosas totalmente diferentes.

-No todo lo que conseguiste con méritos se trata del dinero, reconoce que has sabido superar obstáculos, pensamientos y luchas con tu YO interno, eso es de personas fuertes.

-Sé sincero con lo que quieres, con lo que necesitas, con lo que no deseas y con lo que no puedes; no cargues más de lo que puedes/quieres, si tu peso es de 30 no cargues 60, ve avanzando precisamente, según lo que necesite o deseas.

-Identifica tus fortalezas y explótalas al máximo y de la misma manera hazlo con tus debilidades para que veas qué puedes reforzar o para lo que definitivamente no eres bueno.

Estamos hechos para brillar a nuestro modo, por lo cual somos seres totalmente inherentes de los demás, esto incluye habilidades, sentimientos y lo ya mencionado, convéncete de que eres capás de lograr cada objetivo, antes de querer cambiar a alguien, recuerda que cada uno lucha su batalla y que el hecho de que no quepas en la vida del otro no significa que debas romperte; significa que ese no es tu lugar.

La próxima vez que no creas así, repite conmigo: Me pido perdón por todas las veces que dejé de ser feliz por alguien más. En mi casa, en mi trabajo, en mi relación amorosa, con mis amigos o por cualquier situación que haya puesto en peligro a mis sueños y a mi felicidad.

Por último y no menos importante, define si tu rol en esta jungla llamada vida es el de un espectador o protagonista.

Espero querido lector, no haberme mordido la lengua…

Historia Anterior

@YoAcosada por Luz Atenas Mendez Mendoza

Siguiente Historia

La espera por Adonai Uresti