Iris García Cuevas nació en 1977 en Acapulco, Guerrero. Ha publicado Ojos que no ven, corazón desierto (2009), 36 toneladas (2011), colaboraciones en El silencio de los cuerpos. Relatos sobre feminicidios (2015), Teatro de la Gruta VIII (2008), Breve colección de relato porno (2011) entre otras. Ha recibido múltiples premios de escritura y menciones honoríficas. Ha sido becaria de CONACYT (Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología) y del FONCA (Fondo Nacional para la Cultura y las Artes).
Sueño de arena es un viaje incómodo por las situaciones ignoradas a las que se enfrenta nuestro país actualmente. La voz en primera persona que se desarrolla específicamente en esta narración nos permite sumergirnos en el interior desgarrado y oscuro de un ser femenino que sufre y se lamenta, nos hace partícipes de su reproche constante hacia la situación en la que se encuentra momento a momento, un ser femenino que se asegura reiteradamente la imposibilidad de la realidad que sufre.
Llegué al cuento de la misma manera en la que se llega a toda la buena literatura: por accidente. Leer a Iris es simplemente delicioso; ¿su ejecución del lenguaje escrito? Admirable. Comunica ideas “por lo bajo”, es decir, comunica sin querer comunicar.
El ritmo lento con el que se desarrollan las frases cortas y concisas que dan forma a la narración nos dejan saber el constante sufrimiento del personaje.
No soy yo. La mujer acostada con las piernas abiertas, vestida con la bata ridícula que se amarra con dos cintas por la espalda, no soy yo. A mí siempre me han dado miedo las jeringas. Con sólo imaginarme el metal delgadito traspasando la carne se me enchina la piel, me tiembla la quijada. A ella van a encajarle uno en la mera vena, y no grita, no llora, no se larga corriendo. No. No soy yo. No puedo ser yo. Es otra.
No se realiza una protesta ante la violencia ni la corrupción a texto abierto, tienes que herir el texto, desmembrarlo e interiorizar. Eres tú a quién están desmembrando, eres tú quien siente miedo, eres tú a quién le rompieron el corazón. No hay mención alguna que de contexto social, el sufrimiento social se vuelve personal dentro de las demandas políticas. Iris García plantea a la perfección un discurso político que se volverá interno y que asombrará al lector, eso seguro.
Por otro lado, el inevitable dolor que recibirá nuestra compañera se desarrolla en torno a dos ejes centrales: la progresión de una situación de violencia cerca de las zonas fronterizas y la dificultad de mantener una relación de pareja sana. Ella, nuestra compañera en la historia, se plantea constantemente la verdadera necesidad de sentirse amada y querida por alguien más.
La arena mencionada por el personaje nos traslada al desierto, a una zona seca y muerta como una referencia de aceptación y pérdida, como una “bandera blanca” ante la inevitable derrota antes de la batalla. El sueño de arena del personaje es un lugar al que se puede llegar para evitar las situaciones de inconformidad y de dolor, de incomodidad ante lo desconocido y de pérdida de toda esperanza de mejora.
El inesperado desenlace invita a una reflexión acerca de nuestro voluntario desconocimiento e injustificada indiferencia respecto a las problemáticas de violencia que se despliegan en zonas (no tan lejanas) de nuestro propio país.
Cuento: Sueño de arena
(disponible en https://circulodepoesia.com/2009/08/sueno-de-arena-cuento-de-iris-garcia-cuevas/)
Iris García Cuevas.
2009.
México, D.F.
Editorial Tierra Adentro.
