Otra hoja que arranco del calendario de pared,
Una noche más que vive en la blanca ciudad,
Las persianas están menos cerradas que de costumbre,
Tanto que ya hasta me olvidé de mi nombre.
Sin poder dormir,
Salí de nuevo a caminar
Pasé por Viamonte y Lavalle,
Creyendo que Gardel sería la llave.
Son más de las diez,
Por allá sería… no sé,
De madrugada tal vez.
O tan temprano, quizá estén tomando el té.
Ya van tres o cuatro meses
Que llevo haciendo el mismo ritual
Pasando por el bistro por enésima vez
Sin mapa ni rumbo habitual
De tanto caminar
A Sabina empecé a escuchar,
Mis mejillas empiezan a sentir el viento
Caminando por la acera hasta la señal de alto.
En un bar
Una banda local
Está tocando “He visto a Lucy”
Tal cual con el estilo de Cerati.
Miles de kilómetros de distancia,
ningún tiquete en mi mesa de noche
Y sin veneno en la dolce vita
Brillo más que la luna en esta mágica noche.
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Lucía Guadalupe Cruz Carlos (Zacatecas, 1996). Todos le dicen Lucy. Melómana desde pequeña, apasionada de temas culturales, sociales y musicales. Empezando a escribir artículos de opinión y poesía a los 14 años después de una tarea de la clase de español. Trata de mezclar abiertamente el mundo de la música y la sociedad. Aficionada a la poesía de Rubén Dario y a las hojas de la Rolling Stone. Una mexicana que adora el country, mariachi y Sinatra. Seguidora la ideología hippie. Egresada de la Universidad Politécnica de Zacatecas en la Licenciatura de Negocios Internacionales. Espera viajar a Buenos Aires, Londres y Nueva York antes de los 30.
