Dejando de lado los motivos, atengámonos a la manera correcta de llorar, entendiendo por esto un llanto que no ingrese en el escándalo, ni que insulte a la sonrisa con su paralela y torpe semejanza. El llanto medio u ordinario consiste en una contracción general del rostro y un sonido espasmódico acompañado de lágrimas y mocos, estos últimos al final, pues el llanto se acaba en el momento en que uno se suena enérgicamente. Para llorar, dirija la imaginación hacia usted mismo, y si esto le resulta imposible por haber contraído el hábito de creer en el mundo exterior, piense en un pato cubierto de hormigas o en esos golfos del estrecho de Magallanes en los que no entra nadie, nunca. Llegado el llanto, se tapará con decoro el rostro usando ambas manos con la palma hacia adentro. Los niños llorarán con la manga del saco contra la cara, y de preferencia en un rincón del cuarto. Duración media del llanto, tres minutos.
Instituciones para llorar de Julio Cortázar
¡Échale un ojo también!
La nueva banda en el sello viene desde Francia a conquistarnos con vibras ochenteras y dosmileras. Casablanca Drivers presenta “More Guns”, el segundo single…
“Había una luna grande en medio del mundo” Pedro Páramo, Juan Rulfo Fue unas semanas después de volver a los Estados Unidos cuando…
—¿Me das una recarga? —¿De cuánto?… ¿Compañía?… ¿Está correcto? Nunca he podido recordar todos los números. ¿Habrá alguien en la caja que se acuerde…
El bienestar de las personas que viven con diabetes es un tema relevante que debe ser abordado de manera integral y cautelosa. En el…