La marca de los huesitos
sobre tu piel
cerca de tus dos preciados y redondos pechos
un poco más arriba donde juegan las cuentas de tus collares
dos huesitos casi se juntan
divididos por un pozo del tamaño de tu dedo
a los costados de tu vientre, como dos almas separadas
en tus brazos,
en tus muñecas,
debajo de tus coloridas pulseras
tus dedos marcados por los huesitos,
adornados por tus uñas
por ese tatuaje que sobresale un poco.
Un cachito de oro cerquita del huesito
siguiendo la línea que lleva a ver a los demás.