Me caga cuando te rompen el corazón y te dejan deshecha y encima los hijos de puta no dicen ni adiós. Me caga cuando te enamoras tan bonito como lo haces, cuando todo en ti es amor y lo entregas sin dudas, a cántaros en forma de besos, caricias y sonrisas.
Me caga cuando te lastiman casi a propósito y tú te derrotas una vez más.
Me caga que sean tan pendejos contigo y aún así no los culpas por que los amaste en serio, sin querer nada a cambio.
Me caga te duela tanto despedirte.
Y aún así siempre voy a estar para ayudarte a sacudirte, darte dos o tres consejos, sacarte diez o veinte carcajadas y secar una que otra lágrima para que vuelvas a sonreír como me encanta, a que te repongas para seguir adelante y que crezcas con la experiencia.