¿Qué decisión tomarías: el Placer o la Salvación? En la actualidad hemos renunciado a una idea del placer como algo malo o indecente. Procrastinamos, por ejemplo, lo inevitable y después nos lamentamos por los resultados. ¿Somos conscientes de esas decisiones?
El placer en el pasado fue visto como una tentación, de hecho, es parte de los 7 pecados capitales como la lujuria, o en el caso de cuestiones terrenales, la gula con la comida. Sin embargo, ahora casi todo lo hacemos por placer: viajamos por placer, comemos cosas traídas de otros lugares, compramos ropa que utilizamos poco, pasamos largo tiempo viendo programas de tv y además el sexo le eliminamos el dogma y ahora ha pasado a una etapa del sexo líquido.
Entonces, ¿por qué es vigente elegir entre el placer y la salvación? La respuesta viene en la penitencia y es que casi todo lo que nos da placer también nos atormenta en un segundo momento. Por ejemplo, comer demasiado atrae molestias estomacales, cuando vacacionamos el regreso a la vida normal nos cansa más que las mismas vacaciones; parece contradictorio, pero ocurre.
La tesis principal de la Ópera Tannhauser basado en cuentos medievales compuesta y escrita por Richard Wagner en 1845, es precisamente elegir entre el Placer y la Salvación, dos mundos que parecen distantes pero que en ópera espectacular lo hacen muy bien. Es una de las puestas en escena más largas, con tres actos y más de tres horas de duración. Algunos dirán que es una tortura, para otros es una obra maestra que habla de la calidad de los músicos y cantantes. La LAOpera cuenta con más de 145 artistas en el escenario.
La ópera desde su inicio es realmente envolvente. La obertura es hermosa, es precisa, representa un triunfo, mas no sabemos sobre qué, nos invita a contemplar lo venidero. Es precisamente la capacidad de Wagner de avecinarnos a lo mágico y grandioso, como él solo lo sabe hacer, con música excepcional, fácil de recordar. Les dejo al gran Karajan dirigiendo la obertura de esta opera:
En la Ópera existen dos mundos: el del placer representado por algo mágico como son las hadas venus, el deseo y unos bailarines sensacionales, los colores que la representan son rojos y el portal de entrada son ventanas y puertas que al abrirse te invitan aquel mundo. Aquí les dejo algunos comentarios de la coreógrafa Aszure Barton, quien manifiesta ser la primera experiencia en ópera:
¿Cuáles son los momentos claves de la ópera? Desde el inicio te envuelve, te invita, es una experiencia que te mantiene pegado a tus asientos, concentra ese dramatismo de cine que no te permite moverte para no perder ningún detalle.
La producción, escenarios movibles que representan varios cuadros a la vez, eso sin lugar a dudas lo hace mágico y es necesariamente un reto para todo aquel involucrado en el diseño de la misma. El diseño de iluminación es clave y realmente define el ambiente, es muy fácil entender en qué mundo se encuentra, si en el terrenal o en mágico. Los cantantes, es un elenco numeroso de excelente calidad y de gran trayectoria. El coro, los solistas son definidos con la perfección. La orquesta dirigida por el muy prestigiado James Conton.
La LAOpera me ha enseñado en dos producciones como se puede reinventar la opera y las historias mágicas que aunque son tragedias, no dejan de ser espectaculares y parte de nuestra vida, porque las historias del pasado aun las vivimos y sufrimos. Aun pueden disfrutar de la Opera en vivo o via Streming en su sitio oficial https://www.laopera.org/. Además puedes disfrutar de nuestra cobertura dentro LAGolfa.MX
Dejamos algo en el tintero, ¿qué eligió Tannhauser? Esa respuesta se las dejare para ustedes, ya sea que la investiguen o que la vivan en una de las presentaciones por venir.