No es desconocido que la estadounidense impacta significativamente en la literatura contemporánea, en particular la escrita en el nuevo milenio. En estos ya veinte años, se han publicado obras de calidad, tales como Ciudad en llamas (Garth Risk Hallberg, Random House Mondadori: 2016), Libertad (Jonathan Franzen, Salamandra: 2010), Una hermosa doncella (Joyce Caroll, Alfaguara: 2011), La maravillosa vida de Óscar Wao (Junot Díaz, Random House Mondadori: 2008) y La conjura contra América (Philiph Roth, Random House Mondadori: 2004), claro omitiendo la literatura comercial y de autores emergentes. Para quienes desean empaparse de la literatura estadounidense del siglo XXI, quizás las listas de ganadores y finalistas de National Book Award y Pullitzer Prize, este último se extiende, como se sabe, a otras áreas, son guías perfectas.
En 2018, la neoyorquina Sigrid Nunez recibió el National Book Award en la categoría de ficción por, justamente, El amigo (Anagrama: 2019), el cual motivó la redacción del presente texto. La novela narra la historia de una novelista que pierde a su mejor amigo y mentor y se ve obligada a adoptar a Apollo, un gran danés de casi cinco años de edad. Ambos, mujer y perro, se acompañan durante el duelo y el dolor, que significaron el suicidio del mentor.
Uno de los temas del libro es el dolor, surgido a partir de la pérdida. Lo interesante de éstos es que se vuelve en el pretexto para reflexionar sobre el mismo, a partir de la literatura y el periodismo, en particular sobre las mujeres desplazadas por la violencia en pueblos africanos, con régimen dictatorial. Las desplazadas lloran, incluso en silencio, por el asesinato de sus familias, en particular sus esposos e hijos. En este aspecto, me es imposible recordar los casos de personas que debieron moverse por la violencia y el hostigamiento de los grupos delictivos. Por supuesto, la migración forzada también produce una pérdida, la de un territorio, que en su momento hicieron suyo, y la muerte: de algún modo, inician probablemente una adaptación a los nuevos espacios y se enfrentan a nuevos desafíos. El perro, como el astro, se desplaza de un lugar a otro, al forzarle el abandono de su hogar, aunque al parecer no es la primera vez, pues la escritora es la tercera dueña: mantener en Nueva York a un gran danés es difícil de criar, más por la escasez de lugares abiertos para que esta raza canina se ejercite con propiedad. Apollo, enfrentándose a otro panorama de vida, se acuesta sobre sus cuatro patas para esperar al dueño. Al hablar de ello, la narradora reflexiona sobre los perros como personajes culturales, sociales y literarios, aborda a quienes esperaron a sus dueños hasta morir y sus relaciones con los humanos; el enfoque va más allá de la represión simplista de éstas, sino también se acerca a las eróticos —claro, sin caer en el bestialismo.
Otro tema, relacionado con el anterior, es el suicidio, siendo uno de los temas más recurrentes en la literatura: se tienen los casos de los jóvenes amantes de Romeo y Julieta, Ofelia en Hamlet, los pobladores en El cerco de Numancia, Yocasta en Edipo Rey y los protagonistas de Áyax y Las penas del joven Werther. La jerónima sor Juana Inés de la Cruz (1648-1695) lo aborda en varios sonetos, Engrandece el hecho de Lucrecia (153), Nueva alabanza al hecho mismo (154), Contrapone el amor al fuego material, y quiere achacar remisiones a éste, con ocasión de contar el suceso de Porcia (156) y Refiere con ajuste, y envidia sin él, la tragedia de Píramo y Tisbe (157). Aunque no entra en detalles del acto realizado por el tutor, la protagonista se acerca al suicidio, aunque éste va más allá de culpar a su amigo, no se trata sino de entenderlo, pues no hay nota que describa las razones de su actuar.
Un tercer tema es la literatura. La narradora reflexiona sobre si las redes sociales, tales como Twitter, Facebook y Tumblr, tienen relevancia en la literatura contemporánea, pues muchos críticos e intelectuales, entre ellos Umberto Eco, no las consideran, a pesar de su papel en las relaciones sociales y la comunicación actuales; no hay una posición clara, más bien problematizar sobre ellas; los cursos de escritura creativa, comunes ya en Estados Unidos, se enfocan en la formación de escritores, ya como oficio, y abre el debate sobre su pertinencia social y cultural, en las sociedades contemporáneas y capitalistas; a partir de presentar una relación de autores, principalmente narradores, la protagonista aborda el proceso creativo y las diferentes perspectivas tenidas sobre éste, desde la tradicional (la escritura como consecuencia de la inspiración) hasta una más cercana a nuestro tiempo (ella es el resultado del trabajo y la constancia de los autores).
El amigo es una novela, que en ciertos momentos sabe a un debate, aunque es cierto que la misma literatura ensaya sobre temas y plantea las ideas que se tiene de, en este caso, el suicidio, el dolor y las relaciones humanas. Es una de las novelas más interesantes y absorbentes.
