Si comenzamos preguntándonos si ha habido mujeres y hombres homosexuales, bisexuales, cisgénero o trangénero a través de la historia y contestamos tajantemente que sí, caemos en un término que conocemos como presentismo. La verdad es que no se puede asumir la orientación sexual, ni identidad con parámetros actuales
Caeríamos en la heterónoma que dicta que la forma más frecuente de establecer relaciones afectivas y sexuales en la actualidad es “normal” y la “natural” entre personas de diferente sexo y la proyectamos al pasado encaje o no. Las personas que estudiamos la Historia o la Antropología debemos tener mucho cuidado cuando estudiamos la sexualidad en el pasado y debemos tener ciertos matices y precauciones puesto que muchos saltarían para denotar que es una opinión personal o que estamos aplicando anacronismos tratando de imponer ideología. Ahora ¿Se puede hablar de una historia LGTB y sexualidades en el pasado? Sí y no
La identidad sexual no existían como tal en el pasado y el concepto es meramente moderno y nacido en la época contemporánea, al igual que el termino homosexual, que no aparece hasta la década de 1860 cuando la medicina y la psicología trataban de analizar todos los comportamientos humanos y catalogar todas la patologías que la sociedad victoriana dictaba como la norma. Es entonces que de manos de psiquiatras como Richard Von Kraff-Ebing y su libro Psycholopathia sexuales donde delimita y nombra las tendencias sexuales; al homosexual como aquel que siente una atracción “anormal” por su mismo sexo pero también al Heterosexual (primera aparición del término) como un ser humano con tendencias “anormales” y desenfrenadas hacia el sexo opuesto. ¿Los heterosexuales unos desviados? Bueno es que estamos todos juntos en este barco.
Puede que llamar a Leonardo Da Vinci u Oscar Wilde un icono gay sea un más un acto político de los defensores de los derechos LGTB y no una realidad del todo, puesto que estamos transportando al pasado etiquetas y categorías del presente.
Así como el género, sí lo vemos como una categoría a lo largo de distintas culturas, tener una identidad en base al grupo de población que te atrae sí que parece algo reciente (al menos en occidente). Michel Focult en su Historia de la sexualidad concluye que antes del S. XIX la homosexualidad involucraba actos más no identidades, las sociedades del pasado entendían sexualidad no como una identidad sino como un acto, en muchos casos no en base al género de las personas involucradas sino más a la postura que ocupaban, (como en la antigua Grecia, es decir quien insertaba y quien era insertado).
El acto sexual durante la baja Edad Media y el Renacimiento era la sodomía, que se entendía como un acto, pecado o crimen en el que cualquier podría caer, no como una identidad, el pecado recaía en que un hombre se dejase dominar, no tanto una atracción o amor por su mismo sexo y aunque sí existían otros términos para referirse a identidades como marica o maricones que eran hombres afeminados (que no precisamente no sentían una atracción por otro hombre) lo cual denota que el S. XVII existían maricas pero no hetereos . Así que sí, cuando en la Historia o en la Antropología estudiamos la sexualidad en el pasado debemos andar con mucho cuidado porqué y perdóname que recurra al estereotipo posmoderno, la sexualidad es un constructo social, es decir, que es un invento y que lo hemos entendido de formas tan distintas, en distintos momentos y en tan diferentes culturas a lo largo de la Historia. La gran variedad de culturas del pasado sí que han tenido una idea de que hay comportamientos sexuales que son aceptables y otros comportamientos sexuales como tabú. Pero ¿Qué se ha calificado como algo natural y algo como una perversión? La respuesta sería ambigua y variaría del tiempo que se estudie y la cultura. Por ejemplo en la antigua Grecia estaba bien visto que un hombre adulto y ciudadano se acostara con adolescentes siempre y cuando él fuera el que dominara y nunca al revés puesto que eso era una perversión (si lo pasamos a comportamientos actuales, entenderíamos que es un abuso). O los piratas y los contextos homosociales, pero eso, eso es otra historia