Los Bonobos y su ritmo contagioso por Alejandra Flores

 La música es poderosa. Mientras la gente la escucha,

puede ser afectada. La gente responde.

-Ray Charles.

¿Ustedes sabían que un Bonobo es una especie de chimpancé y que además son muy peculiares que su ADN es idéntico al de los homo sapiens en un 98%?. Bien, pues este es el nombre de la banda que hoy les presentamos.

 

 

Ritmo Bonobo es esa clase de agrupación que te hace ponerte de buen humor desde su primer acorde, así que si tuviste un mal día y quieres agarrar la buena onda, este grupo de poblanos tiene la dosis exacta de Reggae y otra fusión de ritmos que te hará mover las caderas. Algo muy interesante de la banda es que todas sus letras tienen un mensaje que promueve la “NO VIOLENCIA” y en estos tiempos tan convulsos definitivamente es una gran aportación para la sociedad. ¿Por qué no creer que la música puede transformar al mundo?

Su álbum “Acabamos de llegar” sin duda alguna te transporta a una playa, llena de sol, con frutas exóticas, olor a coco y la mejor de las vibras, es imposible escucharlos y no querer bailar. También hay que mencionar que entre los integrantes de Ritmo Bonobo se encuentra una mujer con talento desbordante, sin dejar de mencionar al resto del equipo, todos hacen que la banda se complemente de manera maravillosa.

Ritmo Bonobo no necesita que los escuches por mucho tiempo para que te enganches a su ritmo, basta con que escuches un poco de ellos para que te vuelvas fanático de su propuesta.

En 2015 recibieron la Mención Honorífica por el Instituto Poblano de la Juventud por su trabajo e impacto con los jóvenes en el área de Expresión Artística, Cultura Indígena y Artes Populares. Apoya a las nuevas bandas mexicanas, no te arrepentirás.

 

Si quieres saber más de esta gran banda, te dejamos sus redes sociales:

www.facebook.com/ritmobonobo

Twitter @ritmobonobo

Instagram @ritmobonobo

https://open.spotify.com/artist/2fZQNlafaJzjABObX83Om0

Historia Anterior

Capitán Fantástico por Karla Aguilera

Siguiente Historia

Criatura por Gabriela Cano