Guanajuato, Gto. A 3 de mayo de 2022
PRONUNCIAMIENTO
Escribiendo desde la tristeza, la rabia y el hartazgo que nos embarga no solo como comunidad universitaria, acompañamos la pena y rabia de la familia y amistades de nuestra compañera Edith, quien se encuentra herida, y nuestro compañero Ángel Yael, quien fue asesinado a manos de la Guardia Nacional en la ciudad de Irapuato, Guanajuato el pasado 27 de abril. Al ser estudiantes y ciudadanos del Estado, exigimos al Gobierno Federal, específicamente a la Fiscalía General de la República, proceda de forma veraz y competente hasta las últimas consecuencias de justicia, asignando un fiscal especial para este caso, dada la visible incompetencia de las instituciones en todos sus niveles.
Es importante mencionar que, lamentablemente, el caso de nuestro compañero Ángel Yael no es un suceso aislado. A través de los años, hemos atestiguado cómo los militares van tomando las calles y haciéndose cargo de la seguridad pública y destruyendo miles de familias consigo, trayendo numerosos casos de abusos y víctimas a causa de una guerra ficticia, dejando un aproximado de 350,000 personas han sido asesinadas, y más de 72,000 desaparecidos desde enero de 2006 a mayo de 2021. Es por ello que como sociedad en general invitamos a exigir una alternativa a la ya notable militarización del país.
Ante ese panorama que vivimos día con día, inundado por el dolor, el miedo, la injusticia y la impunidad, hacemos un llamado a toda la comunidad no solo universitaria, sino también civil; a recordar que esta movilización surge desde el hartazgo de vivir en un escenario estudiantil que se vincula desde la verticalidad e institucionalidad, que niega nuestras voces y vivencias no solo como estudiantes, sino como personas. No olvidamos que la rectoría de nuestra universidad ha sido cómplice de encubrimientos, casos de injusticia y abusos de los que hemos sido víctimas. Recordamos a Daniela Vega, Humberto, Gabriel, Luis Eduardo, Diego, Nelly Yesenia, Sol, y ahora, lamentablemente a nuestros compañeros Ángel Yael y Edith. La Universidad, el Estado de Guanajuato, el Municipio y la Fiscalía firmaron un convenio en 2019, el cual no ha sido cumplido. Siendo tales razones por las cuales deslindamos de nuestra manifestación el nombre de Luis Felipe Guerrero Agripino.
Demarcamos que esta organización nace con motivo de acompañar y replicar las voces de familiares y personas cercanas a Ángel.
La militarización del país debe parar, hacemos un llamado a la sociedad para exigirlo.