Se pueden hacer maravillas por Miguel Toral

Tuvieron que pasar poco más de 60 años para que la Mujer Maravilla llegara a la pantalla grande, tuvieron que pasar grandes descalabros en las franquicias de DC para que pudiéramos ver algo brillante en ese universo que si bien empezó tarde –muy tarde- su carrera contra Marvel, lo hizo también sin un plan y sin una idea clara de cómo unir a todos sus super’s.

Con la Mujer Maravilla, todos sus pecados incluyendo Escuadrón Suicida se ven absueltos.

La premisa es básica, una película sobre el origen, transformación y ascenso de un súper héroe, que adivine, sí, va a salvar al mundo de su destrucción. Se va a enfrentar a un conflicto personal, se va a enamorar y saldrá bien librado de sus batallas, pero vámonos por partes, porque la Mujer Maravilla le da al clavo a la fórmula secreta de los héroes: contar una historia honesta, construir un personaje y crear una identificación ida y vuelta con el público.

Por aquí hubiéramos empezado.

En La Mujer Maravilla nos olvidamos un poco del universo en el que nos metió –a golpes- Zack Snyder en Superman vs Batman –o su nombre era Martha- y comenzamos casi de cero, ubicados si en el presente, con la mismísima Gal Gadot –quien si no ella para interpretar a la Diana- recibiendo los archivos de Bruce y saltando al pasado. 

Gal Gadot hace click con el personaje desde Batman vs Superman, de hecho es la única bien entonada en todo el universo, y es ella precisamente el hilo conductor para echarnos el salto y conocer  a las amazonas, envolvernos en su universo y creerle por momentos su ingenuidad ante el mundo, he aquí la parte honesta de la cinta, confiar siempre en el protagonista, en su historia y en su devenir, porque si algo notamos en las poco más de dos horas de duración es que Gal Gadot lo bien como Mujer Maravilla y Diana.

En lo técnico, la película no tiene pierde, hay escenas de acción –quizás más de las necesarias- hay efectos especiales que dan atmosfera en todo momento y el 3D es por momentos glorioso.

Sin duda Patty Jenkins, la directora de la cinta será apapachada con algún otro proyecto de DC –y como no, re vivió el universo y puso en el mapa una vez más a los héroes de esta casa-

No todo son buenas.

La mala noticia es que la Mujer Maravilla será tristemente la excepción que confirmará la regla de que todas las películas del Universo DC son malas, al igual que lo hicieron las de Nolan y alguna que otra de antaño, incluso no tengo dudas que la fórmula de Jenkins va a ser repetida más veces para asegurar el éxito taquillero.

Historia Anterior

#TodosSomosTodo por Sandra Fernández

Siguiente Historia

Spider-Man y Tony en la NBA