apuesto mi verdad
todo el tiempo
y nunca tengo un as
bajo la manga.
me agrada
poner las cartas
sobre la mesa
y reconocer que
algunas personas
son mejores
ocultando su sentir.
de todas maneras,
ganar no significa nada
(¿o eso me digo para dignificar
mi manera de valer madre?)
como sea,
desafortunado en el juego,
desventurado en el amor.