Trazos musicales siguiendo el Bit

Cuando nos encontramos frente a una pieza de arte abstracta y modernista, ponemos los ojos en la re interpretación de la realidad, tanto del artista, como del espectador.

Cuando la composición se va creando frente a nuestros ojos a través de formas cubicas de todos tamaños, nuestra percepción va decodificando cada punto, cada línea y cada trazo para encontrar la forma y descifrar el mensaje.

Pero cuando todos estos aspectos se llevan al contexto de la música, y se identifican con la digitalización, desciframos los mensajes de manera en que los procesos mentales develan la crítica a una sociedad que, creyendo que el mundo de las redes re define a la humanidad y la libera, nos sorprende todo lo que encontramos en Pixel de Stael.

Proyecto electrónico que va más allá de lo lúdico usando herramientas que en su contexto, se auto critican y, a su vez nos pone en la arena del cuestionamiento de su efectividad.

Todo los que nos ofrece este proyecto de música glitch-pop es presentado en esta conversación que tuvimos con Pixel de Stael:

Ourbit: ¿Nuestro móvil estará, progresivamente, volviéndose más humano que nosotros?

Pixel de Stael: Lo más probable es que a la larga los móviles acaben desapareciendo de nuestras vidas y sean sustituidos por otras cosas. Pero es gracioso imaginarse a los teléfonos móviles convirtiéndose progresivamente en seres humanos. Lo más complicado sería conseguir que desarrollen un aparato digestivo. Si los desarrolladores de smartphones consiguen que los diseños de sus teléfonos del futuro tengan necesidades y vayan al baño, sin duda se ganaran nuestro respeto y profunda admiración.

La estética de Pixel de Stael está influenciada por las obras de Nicolas de Staël, pero también llama la atención que tenga una paleta de colores con predominantes tonos fríos. ¿Se busca transmitir algo en específico con esto?

Nuestra estética toma de Nicolas de Staël su forma humanista de abarcar la realidad. Un paisaje puede plasmarse perfectamente sin la necesidad de recurrir al detallismo formal. Y para ello no recurre a la simplificación, sino más bien a la reducción de información. Nosotros consideramos a Staël como a un precursor del pixel art. Creemos que buscaba representar la complejidad del mundo a una escala más humana. Con Pixel de Stael tratamos de hacer eso con música y con las imágenes que la acompañan. El hecho que usemos tonos fríos tiene que ver más bien con el contexto aséptico que rodea a nuestros personajes. Son personas llenas de vida enfrentadas a una urbanidad fría.

¿Qué herramientas tecnológicas complementan su composición y producción?

Pequeños sintetizadores (híbridos, de cinta, analógicos, FM, digitales…), samplers viejos y modernos, dispositivos digitales variados, un ordenador defectuoso, recursos digitales de Daw combinados (Pc + Mac), una game boy hackeada, una radio barata, pedales de guitarra, combinaciones experimentales de micrófonos high fi y lo fi, una guitarra eléctrica…

Sobre, ‘Hay Tiempo’:
Entre tanta oferta dentro del universo digital, ¿realmente aprovechamos el tiempo? ¿o sólo estamos saltando de una cosa a otra, sin profundizar?

La personas no somos naturalmente dispersas. Si perdemos el tiempo saltando de una cosa a otra es principalmente porque estamos expuestos a una tecnología que promueve este comportamiento errático. Las pantallas luminosas tienen un gran poder hipnótico, son muy adictivas. Además, el mercado online (redes sociales, tiendas online, videojuegos, etc.) se basa fundamentalmente en retener al usuario el mayor tiempo posible, acumular información sobre sus gustos y costumbres, para luego mejorar sus estrategias de marketing y ventas. Creemos que se puede mantener una relación prudente y saludable con estos dispositivos y reivindicar un mundo donde estas tecnologías tan determinantes se planteen de otro modo y evolucionen en nuestro favor. Es una cuestión de salud pública. ¿De verdad queremos vivir en un mundo de yonquis digitales?

¿Cuál es el mensaje detrás de esta canción?

Justamente intenta retratar al usuario digital corriente. La ironía es un recurso que funciona muy bien para apelar a la conciencia sin ser pretencioso o excesivamente moralista. La letra de ‘Hay Tiempo’ es descriptiva, no da nuestra opinión, es el vacío de la vida retratada lo que sacude al oyente. Cuando estamos inmersos en una realidad no somos capaces de juzgarla debidamente y por eso la letra se distancia un poco, para permitir al oyente verlo desde fuera y, al mismo tiempo, sentirse identificado porque esa realidad, es la propia.

También jugamos con la interpretación de “hay tiempo..”, porque es una forma de decir que aún estamos a tiempo de reaccionar y llevar una vida más auténtica, más libre.

Planes a futuro:
¿Tienen en mente algún trabajo compilatorio para los sencillos que hasta ahora han lanzado?

Los sencillos son adelantos de un disco de diez tracks que saldrá a finales de octubre. La salida del disco estaba inicialmente prevista para junio, pero debido a la cuarentena nos hemos visto obligados, como tantos otros grupos, a posponerlo.

¿Cómo se proyectan para el segundo semestre del año?

El 3 de julio se acaba de editar nuestro quinto single ‘Botes’ y todavía saldrá uno más antes de la salida del disco. Estamos también preparando remezclas y versiones en español para nuestro público latinoamericano de algunos tracks. Además, estamos recandelarizando conciertos que teníamos previstos y el tour de presentación del disco. Tenemos también otras sorpresas en camino, pero están en proceso de desarrollo y no podemos dar detalles.

Cierre:
Un mensaje para todos aquellos que, gracias a las redes sociales, conocieron su música:

Si les ha gustado un poco nuestra música y la idea del glitch-pop, les invitamos a fijarse en los defectos de las redes sociales con las que nos han conocido y a hacer algo sugerente e inesperado con ello. Sería emocionante ver de repente a un montón de gente por el mundo inventando cosas curiosas a partir de los defectos de sus redes sociales.

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Sin duda, este se trata de uno de los más claros ejemplos de que la música sigue inmersa en corrientes con las que pueda distinguirse. Y a ella, la seguiremos llamando Arte.

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