“No puedo respirar”, gritan miles de jóvenes, de mujeres y hombres en el corazón de la capital norirlandesa.
Los habitantes de Belfast salen a la calle para solidarizarse y unirse a las protestas en todo el mundo por el asesinato de George Floyd a manos de la policía y denunciar los sistemáticos abusos y crímenes de odio perpetrados por las autoridades en Estados Unidos.
El movimiento Black Lives Matter, cuyo eco ha movilizado a millones de personas, mostró músculo en Reino Unido y en Irlanda del Norte.
Mientras en Londres, en Hyde Park, cientos de personas alzan la voz, en Belfast miles denuncian el extendido racismo en territorio estadounidense y sus secuelas en otros rincones del planeta.
Las protestas se llevan a cabo mientras Irlanda del Norte permanece en alerta por el avance de la Covid-19 y el primer ministro en Reino Unido, Boris Johnson, evita condenar las acciones y el discurso castrense y odio de su homólogo y amigo Donald Trump.
La ministra de Economía en Stormont, en Irlanda del Norte, Diane Dodds, declaró que el Ejecutivo “entendía” la manifestación en Belfast, “pero las grandes reuniones podrían suponer riesgo para frenar la propagación de la Covid-19”.
Belfast se suma al repudio internacional por el asesinato de George Floyd.































Carlos Underwood
Periodista digital. “Erosión”, el primer filme que codirige y coproduce, ganó como mejor documental en la categoría de “Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable” en el X Encuentro Hispanoamericano de Cine y Video “Contra el Silencio Todas las Voces” 2018. Vive en Belfast, Irlanda del Norte.